El hotel B&B en las afueras de la ciudad ofrece habitaciones amplias y limpias, ideales para familias. El personal del desayuno es acogedor y amigable, y la relación calidad-precio es excelente. Además, la modernidad del hotel es agradablemente sorprendente y el tamaño de las habitaciones es apreciable.

la habitación era lo suficientemente espaciosa y tenía todas las comodidades necesarias. pa mi lo mejor son las vistas al río. el personal era agradable y me ayudó con el parking gratis. la ubicación es encantadora, está no muy lejos de la petite musette. además, estaba en la zona principal.

Las camas eran cómodas, la habitación moderna, con una vista estupenda...

Experimenté una estancia relajante en este hotel ubicado en una zona muy tranquila y rodeado de naturaleza. Las habitaciones son espaciosas y lujosas, con camas realmente encantadoras. El desayuno ofrecía zumo y leche tibia, además de pan fresco. El servicio fue fantástico.

Este encantador hotel en el corazón de Normandía tiene un entorno y una ubicación maravillosos. Cerca de la playa de Utah y con fácil acceso para hacer excursiones, es el punto de partida perfecto para explorar la zona. Además, este hotel ofrece un desayuno delicioso y típico, con pan, croissants, mantequilla y mermelada, que te dejará satisfecho para comenzar el día. Otra ventaja es el precio, ya que ofrece una excelente relación calidad-precio. Aunque las habitaciones pueden tener un estilo antiguo, esto les da un encanto especial. Además, la limpieza es impecable, aunque algunos detalles como las telarañas en los techos le dan un toque especial de autenticidad. A pesar de que el wifi no funciona bien en algunas áreas debido a los muros gruesos, este inconveniente se compensa con la amabilidad y atención de la dueña, incluso si solo habla francés.

Todo fue perfecto.

Ubicación cercana a la playa de Utah y ideal para hacer excursiones. Aparcamiento en la puerta y entorno agradable.- Bonito edificio por fuera y perro cariñoso.- Desayuno correcto y cercanía a un buen restaurante en el pueblo de Carentan.

De verdad no hay nada que no me haya gustado.

El lugar en el que nos hospedamos en Normandía fue ideal. Tenía una ubicación perfecta, con aparcamiento en la puerta y un entorno tranquilo y agradable. Aunque las habitaciones eran algo antiguas, estaban limpias y cómodas. Podíamos disfrutar de deliciosos desayunos con pan, croissants, mantequilla y mermelada típicos de la región. Además, el encanto del edificio y el perro labrador negro que nos recibió con cariño fueron detalles memorables.

Solo me hubiera gustado que el Wifi funcionara mejor, ya que tenía problemas de conexión debido a los gruesos muros del hotel.